Un tirano por el día, un playboy por la noche. Esa es la reputación que precede a Richard VanRyan. Él vive su vida de la manera que quiere, sin importarle las opiniones de otros. No se preocupa ni por nada ni por nadie, y no tiene intención de cambiar su manera de ser. Katharine Elliott trabaja como asistente personal de Richard. Ella le desprecia y no comparte su más que cuestionable ética profesional, pero no tiene otro remedio que soportar y gestionar todas las tareas que Richard le encarga ya que necesita su trabajo para poder subsistir. Hasta que llega el día en el que él le pide algo que Katharine nunca imaginó. Un nuevo acuerdo, con un trabajo diferente: ser su prometida en lugar de su asistente personal. ¿Qué es lo que puede suceder cuando dos personas que se detestan tienen que vivir juntas y actuar como si estuvieran locamente enamoradas? ¿Sobrevivirán al acuerdo que han firmado?

Desde que lo vi en las novedades, sabía que quería leerlo. No me ha defraudado. Era justo lo que esperaba encontrar. 
Richard es un playboy y un déspota, mandón, que no trata nada bien a su asistente personal, Katharine Elliott.
Ella es todo lo contrario: Buena persona, nunca tiene un mal gesto, es todo amabilidad. Incluso con un jefe tan mandón.
De repente su jefe necesita un favor de ella, y accede a escucharle. Pero también está dispuesta a arriesgarse. Kathy cuida a Penny, a la cual considera su madre. Está en una residencia, muy cara, y necesita el dinero que le ofrece su jefe. 
Después de firmar el acuerdo, el cual incluye casarse y mantenerlo durante un año o dos. Depende del tiempo que haya que mantener la farsa.
Con lo que ninguno cuenta es que Kathy no es todo lo que parece: Cuando la cabrea, saca su genio, y este parece gustarle a Richard. Ve que no siempre es tan tonta para acceder a todos sus caprichos. Si lo hizo en el pasado es porque le interesaba el dinero que le pagaban por aguantarle. 
Lo bonito de esta historia es ver como va cambiando el carácter de Richard gracias a Kathy. Ver como la va conociendo gracias a las historias que le cuenta Penny. Poco a poco el amor surge, pero ninguno sabe que han ido naciendo sentimientos del uno hacia el otro. 
Vemos, que lo que comenzó como una venganza para Richard, va cambiando y se siente a gusto en la nueva empresa. Incluso empieza a sentir remordimientos por estar engañando a todo el mundo. También Kathy. 
En el libro todo el tiempo estamos viendo el punto de vista de Richard, en contadas ocasiones la de Kathy, pero no ha supuesto ningún problema. Me ha gustado de todas maneras