Alexander Crawford, alias ¨Lucifer¨, sabe que he descubierto su juego de seducción así como todas sus mentiras. Es por ello por lo que decido romper cualquier clase de vínculo con él. Algo que el arrogante multimillonario no encaja nada bien.

De ahí que insista en que nos veamos, aunque yo solo aspiro a encauzar mi vida, y, simplemente, olvidar lo sucedido. Pero el carácter indomable, impulsivo, y autoritario del enemigo no facilita mucho las cosas, sino que las empeora, y tanto que Linus cree que debo de tomarme la revancha por todo el daño que me ha hecho, aunque ¿hasta dónde estaba dispuesta a llegar yo con tal de darle un escarmiento a Lucifer? ¿Cómo encajará éste mi repentina amistad con Dylan Caine? ¿Permitirá Natasha una relación entre su hijo y yo? Y sobre todo, ¿quiénes son los Crawford, y qué secretos esconden, ahora que nada es lo que parece?…

Hacía mucho tiempo que esperaba la segunda parte de esta historia. Pero me ha defraudado. Está mal editada, tiene muchos errores ortográficos y molestan a la hora de leer. Por otro lado, la historia va adquiriendo unos giros que no se parecen en nada a la primera historia que me enganchó un montón.

Alex, alias Lucifer, parece haber adquirido otro personaje desde la primera novela. Ella, Emma, lo mismo parece que se ha vuelto tonta de repente. 

El primer libro lo leí rápidamente, este se me ha atravesado un montón. Lo he terminado para ver que giros daba la historia. Pero iba de mal en peor.

Leeré el tercero si lo publican algún año. Pero espero que la cosa mejore