Harper ha planificado hasta el último detalle de su futuro. Pronto acabará sus estudios y logrará el trabajo por el que tanto se ha esforzado. Tendrá la vida que desea. Sin embargo, una triste pérdida hará que su plan perfecto, aquello que creía querer más que nada, se transforme de nuevo en confusión, dudas e inseguridades.

Porque los secretos no pueden guardarse para siempre. Porque hay caminos destinados a cruzarse.

Porque una sola decisión puede cambiarlo todo y nada da más miedo que arriesgarse por tus sueños.

Porque la vida no se trata de sobrevivir a la tormenta, sino de aprender a bailar bajo ella.

Me encanta esta autora y su sensibilidad para describir todo: Sentimientos, paisajes, fenómenos naturales, malos momentos, buenos...etc. 

En esta ocasión conoceremos a Harper. La hermana pequeña de tres hermanos. Estudia y trabaja, pero realmente no sabe si eso es lo que debe hacer. Su abuela acaba de morir y le ha dejado en herencia una vieja librería y un piso. Su padre por el contrario quiere que se deje de tonterías y que se vaya a trabajar en el negocio familiar. 

Después tenemos a Trey que aparece de nuevo en su vida después de 7 años. Cree haberlo superado, pero no es así. 

También estará la mala relación de Harper con su padre. Sin saber porqué, algo que iremos descubriendo a medida que vayamos leyendo. 

Una historia en la que parece que todo está en su lugar, pero aún no sabemos como, ni dónde, ni si ese será su lugar. La vida da muchas vueltas y en ocasiones por mucho que te marques un plan, o es el que te hace feliz, ni sonrerir.