La muerte de mi padre me ha traído de nuevo a Chicago, donde solo he encontrado problemas: he tomado las riendas de la empresa familiar, que está ahogada por las deudas, he descubierto secretos que jamás hubiera imaginado y reconozco que tengo serias dificultades para mantenerme alejada de él: Tyler Gallagher. Un bombero insoportable cuyo cinismo me impulsa a correr en sentido contrario. Soy Alice Jane Lynch y así empezó todo. Han pasado diez años desde que Alice me abandonó; ha vuelto para colarse en mi casa, en mi familia… y, aunque no parece la misma niñata caprichosa que yo conocí, no me fío de ella. No sé cómo lo hace, pero ella solita se basta y se sobra para acabar con mi paciencia, con mi sensatez… y con mi fuerza de voluntad. Soy Tyler Gallagher y aquí empieza nuestra historia.

Cuando leí la primera historia, Nunca serás agua, no sabía que iba a contar la historia de Tyler. Es verdad que te quedabas con ganas de saber más de los hermanos de Megan. Y aquí llegó la historia. 
Me ha gustado mucho. 
Empieza en el pasado para que sepamos porque sufre nuestro protagonista. Y conoceremos a Alice, o Aj como la llama Megan. 
Ella es o parece la típica pija, alocado, niñata consentida que es una irresponsable. Pero parece que la vida la ha puesto en su lugar. Su padre ha muerto y le ha dejado la empresa en herencia. Está a punto de divorciarse de su marido con el que lleva más de 10 años casada, pero se da cuenta que está cansada de aparentar algo que no funciona. 
Regresa así a Chicago y se reencuentra con su amiga Megan y por supuesto con Tyler. 
Megan está preparando la boda con Nick y ha invitado a su mejor amiga Aj. Tyler no sabía que ella iba a asistir y se porta bastante mal con ella. 
Poco a poco se irán encontrando y veréis las que arman juntos. 
No os voy a contar más. 
Tyler es un personaje que me ha gustado mucho. Está dolido y no confía en las mujeres. Ni mucho menos en las relaciones. Pero parece que la única que le interesa mantener lejos es la única que no puede sacarse de la cabeza. 
Una historia de segundas oportunidades muy bonita. Con unos diálogos muy divertidos. Y que no podrás parar de leer.